La CoEHAR envía una carta al Gobierno español
- 13 Ago, 2024
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Los miembros de CoEHAR han enviado una carta al Ministerio de Sanidad español en relación con la reciente propuesta de modificación de la ley antitabaco. Esta modificación podría llevar al gobierno español a restringir la venta de productos considerados eficaces para reducir los daños causados por el tabaquismo únicamente a los estancos, eliminando así las oportunidades que ofrece la compra de estos productos a minoristas autorizados, como las tiendas de vapeo.
Para ello, con fecha límite el 15 de agosto, el Ministerio de Sanidad español ha iniciado una consulta pública destinada a recabar opiniones, testimonios y datos científicos de todos los actores implicados en el proceso de reducción de daños.
A pesar de los avances en las medidas antitabaco, la tasa de tabaquismo en España sigue siendo alta.
CoEHAR valora la intención del gobierno de fortalecer las políticas antitabaco, pero cree que es necesario integrar los enfoques tradicionales de prevención y abandono del hábito con nuevas estrategias de reducción de daños para los fumadores que no pueden dejar de fumar.
La carta, firmada por los líderes de CoEHAR, el fundador, el profesor Riccardo Polosa, y el director, el profesor Giovanni Li Volti, destaca que los productos no combustibles, como los cigarrillos electrónicos y los productos de tabaco calentados, son significativamente menos nocivos que los cigarrillos convencionales y pueden ayudar a los fumadores a reducir los riesgos asociados al tabaquismo y las consecuencias relacionadas con las enfermedades asociadas al tabaquismo.
CoEHAR sugiere considerar estas diferencias en los perfiles de daños en las regulaciones, promover espacios libres de humo y garantizar el acceso a información precisa y clara para los fumadores adultos.
Además, los líderes de CoEHAR recomiendan que la ley antitabaco española no limite el acceso de los fumadores adultos a productos de reducción de daños y promueva la educación pública sobre los riesgos relativos de los diferentes productos basados en nicotina .
La reducción de daños es una estrategia de salud pública que tiene como objetivo minimizar las consecuencias negativas de las conductas de riesgo. En España, como en otros países del mundo, es necesario integrar las políticas de control del tabaco existentes con nuevos enfoques, en particular para los fumadores que no tienen intención de dejar de fumar o no pueden hacerlo por sí solos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce la reducción de daños como parte integral de un enfoque integral, pero lo hace únicamente eliminando o reduciendo el consumo. En cuanto al consumo de tabaco en sí, el programa del CMCT se basa en la abstinencia.
Desde su fundación, CoEHAR ha publicado más de 150 artículos revisados por pares que investigan los efectos toxicológicos de los productos no combustibles, su eficacia y tolerabilidad entre los fumadores, así como su impacto en las condiciones de salud de las personas con enfermedad pulmonar obstructiva crónica que han cambiado a estos productos.
Lo que se ha descubierto es que los productos no combustibles:
Ayudar a los fumadores a dejar de fumar;
Ofrecen una reducción significativa del riesgo de exposición en comparación con los cigarrillos convencionales;
Se asocian con mejoras clínicamente relevantes en usuarios con enfermedades relacionadas con el tabaquismo.
Basándose en la evidencia científica recopilada hasta el momento, CoEHAR ofrece tres puntos y recomendaciones sobre las modificaciones propuestas a la ley española:
1. Promoción de espacios libres de humo : “ Entendemos la intención de proteger la salud pública al equiparar el vapeo con el consumo de tabaco en lugares públicos, pero es importante reconocer las diferencias sustanciales en los perfiles de daños entre el tabaco combustible y los productos de vapeo. Equiparar estos productos podría disuadir a los fumadores de cambiar a alternativas más seguras, lo que socavaría los esfuerzos de reducción de daños. Apoyamos las regulaciones que consideran los riesgos reducidos asociados con el vapeo y respaldamos su papel en la reducción de daños ” .
2. Publicidad, promoción y patrocinio : “ Reconocemos la necesidad de que existan regulaciones sobre publicidad, promoción y patrocinio para evitar su adopción entre los jóvenes. La creciente popularidad del vapeo entre los jóvenes no fumadores es una preocupación legítima, pero las regulaciones no deberían ser tan restrictivas como para limitar el acceso de los fumadores adultos a información precisa sobre alternativas menos dañinas. Las redes sociales y las reseñas de productos son fuentes valiosas de información para los fumadores que estén considerando cambiarse al vapeo. Unas regulaciones equilibradas pueden garantizar que, al tiempo que se protege a los jóvenes, los fumadores adultos puedan seguir tomando decisiones informadas basadas en información fiable ” .
3. Venta y consumo de cigarrillos electrónicos : “ Restringir la venta de cigarrillos electrónicos a las tabaquerías estatales podría limitar significativamente el acceso a estos productos de reducción de daños para los fumadores adultos. Tal restricción podría empujar inadvertidamente a los fumadores a volver a los productos de tabaco tradicionales, más dañinos. Recomendamos permitir la venta de cigarrillos electrónicos en tiendas especializadas en vapeo, donde el personal esté bien informado y pueda brindar orientación sobre su uso adecuado. Además, las ventas en línea deberían permitirse con estrictas medidas de verificación de edad para garantizar que solo los adultos puedan comprar estos productos ”.
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